¿Qué decisión tomó la Alcaldía de Cali respecto a la discoteca? – Primer plano

María José Ardila Era madre de un niño de 10 meses y tenía 23 años. Su cumpleaños fue el 28 de octubre y fue el fin de semana pasado a celebrarlo, al igual que el cumpleaños de su amiga al norte de Cali.

Ese 25 de octubre fue a comer algo y luego a un bar del norte de la capital vallecaucana. Estaba emocionada porque estaba feliz por su pequeño hijo y los sueños que había trazado en su vida.

Su padre, Andrés Ardila, tiene una empresa productora de especias y aderezos. Por esta razón, María José decidió Estudia ingeniería agroindustrial en la Universidad de San Buenaventura en el sur de Cali. Durante sus estudios, cooperó con su padre.

Estaba casada. Su pareja vive en Estados Unidos, y cuando quedó embarazada y tuvo un bebé, se dedicó al niño, soñando con vivir en América del Norte.

Estaba celebrando su cumpleaños y ese día comenzó su agonía.

Sin embargo, su cumpleaños cayó el mismo día en que comenzó la tragedia de María José, luego de participar en una competencia disco que consta de seis desafíos.

El primero fue beber una bebida llamada Doble Cucaracho en cinco segundos. El segundo fue tiros en cinco segundos. En tercer lugar, bebe cerveza sin interrupción. Cuarto, bebe tres. tiros sin manos. El quinto son 13 segundos de guaro o brandy sin regar, y el sexto son octavos tiros diferente con un cigarrillo. El premio de este último desafío fue de 1.500.000 pesos, pero según la familia de la joven madre aumentó a 2 millones.

La grabación muestra que la joven madre asumió el sexto y último desafío hasta la madrugada de ese día. Pero a partir de las ocho tiros llegó a tres.

“Ese último trago me supo fatal”, dijo la joven, antes de caer inconsciente al suelo frente a amigos asombrados y otras personas en el club nocturno.

Luego empezó a convulsionar. Amigos preocupados intentaron sacarla de ese lugar. Sin embargo, según el testimonio de su familia y su padre, ningún taxi se detuvo a recogerla. María José sintió náuseas.

padre dijo Tubarco Tuvo una convulsión y vomitó, pero luego tuvo una aspiración bronquial, lo que provocó el colapso de un pulmón. Luego pasaron 17 minutos y no podía respirar.

Los amigos de María José llamaron a una amiga que los recogió y los llevó al centro de atención. El padre dijo: «Vi morir a mi hija tres veces», porque los médicos la resucitaron tres veces, pero luego perdió el conocimiento. Posteriormente fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos.

«Mi hija se desmayó, vomitó, inhaló su propio vómito y ya no podía respirar», dijo el padre.

Alrededor de las cuatro de la tarde del 30 de octubre, la familia tomó la dolorosa decisión de desconectarla de la red porque estaba en muerte cerebral. El oxígeno ya no llegaba a su cerebro.

El padre invitó a la ciudadanía a una vigilia este sábado 1 de noviembre a las 15 horas. en el Parque Banderas en el sur de Cali.

Según el Secretario de Salud de California, “Ante los hechos de los últimos días, que lamentablemente terminaron con el envenenamiento de una mujer con alcohol étnico (…), queremos informar a toda la comunidad sobre los procesos de control que el Ministerio de Salud realizará en los establecimientos comerciales y puntos de venta de alcohol para garantizar y fortalecer la seguridad del proceso de expendio, comercialización y consumo de bebidas alcohólicas en la ciudad”.

¿Qué dijeron en la discoteca?

Luego de lo sucedido con María José Ardila, la discoteca a la que llegó con amigos luego de salir a cenar emitió un comunicado.

«Sagsa Bar lamenta con profunda tristeza los hechos ocurridos el sábado 25 de octubre del presente año. Expresamos nuestra solidaridad, apoyo y acompañamiento a la familia en este difícil momento y reafirmamos nuestra disposición de brindar todo el apoyo y cooperación necesarios por parte del partido que nos convenga», se lee en el comunicado.

KAROLINA BOHÓRQUEZ

Corresponsal de EL TIEMPO

California