Más de 28 millones de canadienses se dirigen a las urnas el lunes 28 de abril para participar en el proceso electoral que elegirá a 343 suplentes en la cámara baja, en lo que muchos consideran la elección más crítica de las últimas generaciones. Uno de los factores más influentes en esta campaña ha sido el temor a las amenazas económicas y políticas de Donald Trump, lo que sin duda ha dejado su huella en la opinión pública. Este evento histórico está liderado por Mark Carney, quien se presenta como el candidato principal y figura clave en estas elecciones para Canadá.
El inicio del proceso electoral comenzó en Terranova y Labrador, donde los centros de votación abrieron sus puertas primero. En las provincias más pobladas como Ontario y Quebec, el proceso se lanzó a las 9:30 de la mañana, mientras que en Columbia Británica las urnas se abrieron a las 7:00. Esta variación en los horarios refleja la diversidad geográfica y demográfica del país, además de la logística detrás de un evento de esta magnitud.
Esta elección, que inicialmente estaba programada para el otoño, fue adelantada tras la salida de Justin Trudeau en enero, y la posterior llegada de Mark Carney como nuevo primer ministro. La inestabilidad política y el dolor colectivo del país por los eventos recientes, como la gran sorpresa ocurrida en Vancouver durante el fin de semana, han añadido más presión a la contienda.
Mark Carney, el principiante en política liderando las investigaciones; Mark Carney dirige las opciones históricas para Canadá
El actual primer ministro, Mark Carney, se perfila como el gran favorito en estas elecciones iniciales. A pesar de no tener una larga trayectoria en política, su reputación como gerente de crisis durante la crisis financiera de 2008 y el Brexit ha sido crucial para fortalecer su imagen ante los votantes. Esta proyección de liderazgo ha contribuido a que muchos lo vean como una opción viable en un momento turbulento.
Carney ha propuesto recortes de impuestos para las clases media y baja, además de mayores inversiones en defensa, energía y vivienda. Las encuestas recientes sugieren que su Partido Liberal podría alcanzar cerca de 190 escaños, consolidando así una mayoría cómoda frente al Partido Conservador liderado por Pierre Poilievre. Esto indica un posible cambio significativo en la dinámica política del país.
Su campaña ha logrado conectar con votantes moderados, posicionándose como un líder preparado para enfrentar la amenaza de Trump y asegurar la soberanía canadiense ante los desafíos provocados por su poderoso vecino del sur. Al hacerlo, Carney se ha mantenido firme en su mensaje y ha constituido un fuerte vínculo con las preocupaciones de los ciudadanos.
Pierre Poilievre y el desafío conservador ante la sombra de Trump
Por otro lado, Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, se enfrenta a grandes dificultades mientras intenta quiebrar el estancamiento en las encuestas. Aunque empezó el año como el favorito, su asociación ideológica con Donald Trump ha generado dudas sobre su candidatura. Sus propuestas de recortes de impuestos drásticos y su intención de Combatir lo que llama «wokismo» no han sido suficientes para disipar el temor creciente hacia la influencia expansionista estadounidense.
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Poirievre ahora busca distanciarse de la figura de Trump, pero el rechazo popular a cualquier asociación con el ex presidente de los Estados Unidos ha inclinado las preferencias hacia Carney. Además, la reciente tragedia en Vancouver, que dejó un saldo devastador de 11 muertos y docenas de heridos, ha impactado el tramo final de la campaña y creado un clima de incertidumbre, especialmente en la crucial provincia de Columbia Británica.
