La Oficina del Fiscal General se ha dedicado intensamente a perseguir a los presuntos responsables del brutal ataque que costó la vida a la reconocida periodista del crimen Maria Victoria Correa Ramírez y su hermana Maria Nohelia. Este trágico evento tuvo lugar en una panadería situada en la comuna de Envigado, donde ambas mujeres se encontraban en compañía de otra de sus hermanas y un portero el pasado 28 de marzo. Este caso ha conmovido a la sociedad, pues se trata de un acto de violencia que refleja la grave situación de seguridad en la región.
Tras el crimen, las autoridades de la región del valle de Aburrá iniciaron una serie de investigaciones para localizar a tres individuos involucrados en el ataque armado contra la familia Ramírez. Los investigadores de la policía metropolitana trabajaron arduamente, recopilando pistas que llevaron a la conclusión de que los sospechosos no solo huyeron del lugar del crimen, sino que también estaban en proceso de abandonar la ciudad, con dirección hacia Valle del Cauca. Esta huida plantea interrogantes sobre la coordinación y planificación de sus acciones.
De hecho, en una serie de procedimientos simultáneos llevados a cabo en varias localidades, las autoridades de Cali y Tolima registraron propiedades en busca de los sospechosos, incluyendo a Juan Camilo Carvajal Burbano, conocido como Ala Glasses, y otros individuos como Deiby Yulián Puesto Prettel, Aliki Cali, y Yuván Daniel Gómez, apodado El Mello. La interconexión entre estos individuos ha sido objeto de un análisis minucioso por parte de los investigadores, quienes buscan establecer vínculos claros entre ellos y el ataque.
Según los hallazgos de la oficina del fiscal, se ha determinado que Ala Glasses posiblemente fue el conductor de la motocicleta que se utilizó en el ataque, mientras que «Cali» y particularmente «Mello» son considerados figuras centrales en la planificación y ejecución del crimen. Las pruebas recabadas incluyen material de video, donde se observó a «Mello» en momentos cruciales antes y después del asesinato que truncó la vida de Maria Victoria y Maria Nohelia, dejando a Bertha Lía gravemente herida en el lugar.
El 13 de mayo, se produjo la captura de tres hombres, a quienes se les han formulado cargos por los delitos de asesinato, intento de homicidio, y la producción, movimiento, y transferencia de armas de fuego, eventos que constituyen un grave atentado contra la seguridad pública. Este es un proceso judicial que promete ser intrincado y lleno de revelaciones sobre las motivaciones detrás de este horrendo acto.
Los procesos judiciales ahora continuarán para determinar si, como se ha sospechado, los acusados podrían haber sido contratados por parientes de las víctimas, después de que surgiera la noticia sobre la existencia de una herencia significativa a nombre de Maria Victoria y Maria Nohelia. Las complejidades del caso podrían revelar una narrativa más amplia detrás de este trágico evento que ha sacudido la región.
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Nicolás Tamayo Escalante
Periodista nacional, en Medellín.
