El Real Madrid perdió este martes 1-0 ante el Liverpool en la cuarta jornada de la fase de Campeones 2025-26, en un partido en el que el portero belga Thibaut Courtois fue el mejor con ocho paradas, muchas de ellas heroicas, evitando la goleada, para sostener a su equipo ante un conjunto ‘red’ con mucha más energía y que encontró su merecido premio en el gol del argentino Alexis Mac Allister.
El pleno europeo del conjunto merengue se redujo a tres victorias. La primera derrota llegó para los pupilos de Xabi Alonso en esta Liga de Campeones, en su prueba continental más exigente, incapaces de generar peligro para un Liverpool más enchufado y que mostró más ambición por lograr una suave victoria teniendo en cuenta la racha negativa con la que llegaba al partido.
Kylian Mbappé completó su peor partido de la temporada, ausente entre los jugadores ‘reds’, y la carta de Eduardo Camavinga esta vez no funcionó para Alonso. De hecho, el mejor del partido fue Courtois, salvador en varias ocasiones y al que sólo Mac Allister pudo batir en la segunda parte con un cabezazo tras una falta lateral. El Madrid, decepcionante en ataque, no tuvo la jornada en el peor escenario y se queda con 9 puntos, los mismos que un Liverpool que ya va cogiendo velocidad.
El Liverpool entró en el partido mucho más hiperactivo que un Real Madrid al que le faltó la intensidad inicial que exige este tipo de escenarios. De inicio, con Mbappé muy ausente, el equipo de Xabi Alonso aprovechó el recurso de Vinícius, pero con la defensa ‘red’ muy pendiente de las ayudas y muy cómoda en bloque raso.
El respeto entre ambos equipos dominó la primera media hora de juego, hasta que el conjunto ‘red’ tuvo la más clara hasta el momento, con un mano a mano de Szboszlai ante Courtois que el belga desbarató con la pierna derecha en otra jugada golosa del portero. El conjunto merengue entró entonces en minutos de duda y su mayor susto llegó cuando otro disparo del húngaro dio en la mano de Aurélien Tchouaméni dentro del área, pero tras ver el VAR no indicó pena máxima.
Llegaron entonces los mejores minutos del equipo local, con más energía que un Real Madrid preocupado sólo por sacar agua y aguantar los ataques ‘reds’. Aun así, los blancos consiguieron adelantarse con una aproximación de Arda Güler y una elegante penetración de Jude Bellingham, pero Courtois siguió decidido a ser el héroe madridista de la primera parte con otra mano salvadora en el enésimo disparo lejano de Szboszlai.
La segunda parte comenzó como acabó la primera, con Courtois provocando la risa irónica de Virgil van Dijk al mandar a córner un cabezazo del holandés a un metro del portero belga. Saque de esquina que Hugo Ekitike cabeceó a centímetros del segundo palo. Los de Xabi Alonso eran unos conservadores que estaban muy condicionados en un sistema demasiado estático que no les permitía generar casi peligro.
Y volvió a sufrir a balón parado. Szboszlai la metió con una preciosa curva y Alexis Mac Allister remató de cabeza a quemarropa casi sin saltar para batir a un Courtois que parecía imbatible. Los ‘reds’ merecieron el gol y el fútbol hizo justicia con el 1-0. Mbappé seguía sin aparecer y el carácter que se había visto en los últimos partidos se fue apagando con el paso de los minutos.
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Tras dos errores garrafales y lejos de esa influencia que tuvo en el Clásico, Camavinga dejó su lugar a un Rodrygo Goes que tampoco entró conectado. Mientras tanto, Mbappé empezaba a ser la amenaza habitual y envió un buen envío de Vinícius al área lamiendo el palo. También llegó el momento para Trent Alexander-Arnold, recibido con silbidos por The Kop.
El Liverpool supo marcar cerca del tiempo de descuento tras una fantástica jugada personal de Mohamed Salah que remató Cody Gakpo en el área pequeña, encontrándose de nuevo con Courtois, que completó un partido brillante evitando una goleada vergonzosa en Anfield.
