El 1 de mayo, un día que debería haber sido como cualquier otro, Branford, un encantador suburbio en Connecticut, se vio sacudido por un acto de violencia inimaginable. Anthony Andrew Esposito Jr., un hombre de 52 años, fue acusado de cometer un crimen horrendo: la muerte de su propio hijo de 12 años, Anthony P. Esposito. Según el testimonio de Esposito, fue impulsado a llevar a cabo este acto terrible después de escuchar voces que lo instaban a actuar. En su relato, afirmó que estas voces pertenecían a sus padres fallecidos, quienes supuestamente lo habían maltratado durante su infancia. Este caso ha generado conmoción en la comunidad, destacando el sombrío trasfondo detrás de un acto tan monstruoso: «El padre mata a su hijo de 12 años: admitió que escucha voces antes del crimen».
El cuerpo sin vida de su hijo fue hallado en el sótano de su hogar, un lugar que debería haber sido un refugio seguro para él. Tras el terrible suceso, Esposito intentó atacar también a su hija de 16 años, quien logró escapar y pedir ayuda. Poco después, la policía lo arrestó mientras conducía por la carretera 79. Las cámaras corporales capturaron el momento en que confesó el crimen, revelando la profunda descomposición de su estado mental y el horror de sus acciones.
El pasado mental del acusado y su confesión a la policía; El padre mata a su hijo de 12 años: admitió que escucha las voces antes del crimen
Durante una entrevista con las autoridades, Esposito reveló que había sido acosado con frases perturbadoras como «No dejes que salga con su» y «bate de béisbol, bate de béisbol». Aseguró que estas voces lo llevaron a atacar a su hijo después de una discusión. En un giro aún más inquietante, mencionó que si hubiera tenido el bate de béisbol en ese momento, también habría intentado hacer daño a su hija. Este relato ha dejado a muchos preguntándose cómo es posible que alguien pueda llegar a tal extremo de desesperación y locura.
El abogado defensor del acusado ha indicado que Esposito había sido ingresado en hospitales psiquiátricos en varias ocasiones antes del crimen y que en el momento de los hechos no estaba bajo medicación. El juez de la Corte Superior de New Haven ha presentado cargos formales contra él por asesinato con circunstancias especiales e intento de asesinato. Si es declarado culpable, podría enfrentarse a una sentencia de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
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Medidas de shock y apoyo psicológico de la comunidad
El crimen ha dejado una profunda huella en Branford y en las comunidades aledañas. En respuesta a la tragedia, la policía local, en colaboración con las Escuelas Públicas de Branford, ha implementado servicios de apoyo psicológico para estudiantes y maestros que se han visto impactados por este atroz evento. El superintendente Christopher Tranberg, conmovido por la situación, expresó sus condolencias a la comunidad educativa, reconociendo la gravedad de la pérdida.
La declaración de Tranberg fue clara: «La pérdida es impensable. Nos unimos como comunidad para proporcionar contención y cuidado a todos los afectados». Mientras tanto, Esposito permanece bajo custodia, enfrentando un monto de fianza de $3 millones. Las autoridades continúan recopilando evidencia y testimonios a medida que la investigación avanza, buscando comprender no solo los hechos, sino también la mente perturbada de un hombre que cometió un acto tan atroz.
