Jhon Fredy Charry Álvarez, quien contaba con apenas 26 años de edad, dejó atrás su ciudad natal de Neiva, ubicada en el departamento de Huila, Colombia, para embarcarse en un viaje hacia Ecuador. Su objetivo era comenzar una vida mejor, con la esperanza de conseguir un empleo que le permitiera apoyar económicamente a su familia. Sin embargo, lo que debería ser un nuevo comienzo se convirtió en una tragedia, ya que al día siguiente de su llegada a Manta, se convirtió en una de las cinco víctimas fatales de un brutal ataque.
Según relata el Periódico, Charry emigró con la ilusión de encontrar un trabajo digno en la ciudad mencionada, situada en la provincia de Manabí. Sin embargo, su vida se apagó trágicamente cuando un grupo de hombres armados atacó el lugar donde se encontraba.
El inmigrante colombiano fue asesinado en un repentino ataque dirigido a una urbanización privada.
Jhon Charry tenía solo 26 años. Foto:Redes sociales
«Estaban vestidos como la policía»
Charry llegó a Manta el sábado 19 de abril, pero según informes de medios de comunicación ecuatorianos, fue el domingo por la noche alrededor de las 22:50 cuando un grupo de hombres, armados y vestidos con uniformes que parecían ser de la Policía Nacional Ecuatoriana, irrumpió en el complejo residencial de Rania, ubicado en el sector de la ciudadela de Azteca.
Los reportes locales indican que los atacantes lograron ingresar al complejo sin generar sospechas y se dirigieron directamente a la vivienda en la que se encontraban al menos 12 personas.
Sin pronunciar una palabra, comenzaron a disparar indiscriminadamente dentro de la vivienda, provocando la muerte instantánea de cinco personas, entre ellas, Jhon Fredy Charry.
Las otras cuatro víctimas fatales fueron ciudadanos ecuatorianos: Cristofer Stiven Hernández Franco, Jhonathan Javier Ortega Mero, Fabán Octavio Carrasco García, y una niña de solo siete años, Jordan Mikael Franco Falllan.
Manta enfrenta problemas de violencia y criminalidad. Foto:Google Maps
Además, como resultado del ataque, se reportaron siete personas heridas, incluyendo a dos menores de edad que fueron trasladados a instalaciones médicas cercanas para recibir atención urgente.
Las autoridades competentes llevaron los cuerpos al Instituto de Ciencias Forenses de Manta para realizar los procedimientos legales correspondientes.
Hasta el miércoles 23 de abril, las autoridades no habían proporcionado detalles sobre la investigación relacionada con el ataque ni habían logrado identificar a los responsables de esta masacre.
Es importante mencionar que la provincia de Manabí y su capital, Manta, han sido escenario de numerosos eventos violentos relacionados con el narcotráfico en los últimos años.
Cabe recordar que solo unas semanas antes, durante la Semana Santa, sucedió un ataque en el cual doce personas fueron asesinadas y otras nueve resultaron heridas en una balacera en la comuna de El Carmen, donde también los delincuentes utilizaron uniformes militares para llevar a cabo su ataque.
La familia solicita apoyo para repatriar el cuerpo.
En el distrito de La Florida, perteneciente a la comuna 8 de Neiva, la familia de Jhon Fredy Charry Álvarez ha solicitado asistencia al Ministerio de Asuntos Exteriores de Colombia para poder repatriar el cuerpo de Jhon Freddy y llevar a cabo un entierro cristiano en su patria.
«Estamos tratando de recaudar fondos para traer su cuerpo porque el joven era muy querido por todos nosotros», comentó Natalia, una miembro cercana de la familia.
La comunidad está solidaria y esperan pronto que se haga justicia.
