Carlos Alcaraz entra en la ronda de 16 en el Roland Garros – Primer plano
El tenista español Carlos Alcaraz Bealgó (6-1, 6-3, 4-6, 6-4) al Bosnian Damir Dzumhur para acceder a la ronda de Roland Garros, segundo ‘Grand Slam’ de la temporada, otro paso con una oposición que cita con el American Ben Shelton.
La Murcia tenía en su mano un partido de alto nivel, con un Dzumhur amenazante, hasta que en el tercer set, después de un descanso médico de su rival, llegó la falta de control. El bosnio, que parecía abrumado, aumentó sus beneficios y obligó a Alcaraz a hacer lo mismo, pero los españoles tardaron un tiempo en lograrlo.
La sesión nocturna en Philippe Chatrier le recordó al actual campeón el requisito de mantener la concentración en largos intercambios, aunque en su camino ya no hay los nombres de Casper Ruud o Stefanos Tsitsipas. Contradido por el cambio de guión, Alcaraz incluso se vio ‘romper’ a continuación en la sala parcial, pero encontró el camino a tiempo de un mayor susto.
El El Palmar había comenzado contundente, salvando descansos de rotura y aprovechando la suya en un conjunto engañoso. El número dos en el mundo avanzó con un 6-1, pero Dzumhur no lanzó la toalla y sufrió de pie sobre la desesperación de no pasar sus oportunidades. Esto también sucedió en el segundo acto, donde los españoles salieron con un 6-3 que parecía sentenciar el duelo.
Con 3-2 en el tercer set, el Bosnium solicitó la ayuda del fisio y, a su regreso, aumentó su agresividad en los golpes, jugó más profundo y finalmente rompió al murciano. Alcaraz perdió la concentración, detuvo las piernas y retorció demasiado el gesto para un revés que se ajusta a los planes. Con su ira, el campeón no tuvo éxito en seis bolas de ‘break’ antes de dar lo parcial.
Como si eso no fuera suficiente, Dzumhur irrumpió en el cuarto set, aunque resultó ser el toque de atención definitiva para que Alcaraz regresara a la tierra. El campeón de cuatro veces ‘Grand Slam’ perdonó el ‘descanso’ a continuación, pero estaba igualando el nivel de su rival para recuperarse en el sexto juego y agregar tres seguidos.
El Bosnium todavía quería pasar la medianoche en París, cuando Alcaraz tomó el cierre del juego, pero los españoles, con una actitud decidida por un tiempo, distribuida inversa y derecha para sellar la victoria al resto. Con más o menos nombres, Roland Garros mantiene su demanda y, contra Shelton, el campeón tendrá que ser claro.
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