Los deberes de Trump sobreviven después de encerrarse en el Senado
En el Congreso de la Cámara Alta del EE. UU., se detuvo una resolución bipartidista que pretendía restringir el alcance de las tarifas aduaneras impuestas por el ex presidente Donald Trump. La votación se cerró en un empate (49-49), lo que resultó en la frustración de este esfuerzo, el cual buscaba anular la declaración financiera que Trump utilizó para implementar estas medidas comerciales. De este modo, los aranceles impuestos por Trump continuarán vigentes tras un complicado proceso en el Senado.
A pesar de que tres senadores republicanos —Rand Paul, Susan Collins y Lisa Murkowski— apoyaron la propuesta, el resultado final fue sellado por la ausencia del líder republicano Mitch McConnell y el voto del demócrata Sheldon Whitehouse, lo que significaba que la iniciativa no llegaría a buen puerto.
«Muchos empleadores en nuestros estados sufren los efectos negativos de estas costumbres», comentó la senadora Collins antes de que se llevara a cabo la votación.
La Casa Blanca advierte que veto se avecina; Los aranceles de Trump siguen vigentes tras la sesión del Senado
Es importante señalar que la propuesta no hubiera derogado de manera directiva los aranceles, aunque sí era un fuerte posicionamiento institucional en contra del uso de situaciones de emergencia nacional como justificación para alterar el comercio internacional sin la autorización del Congreso. Desde la Casa Blanca, se anticipaba un veto presidencial en caso de que esta propuesta fuera aprobada, lo que limitó su eficacia desde el principio.
El vicepresidente JD Vance se presentó personalmente en el Capitolio para asegurar que el debate adicional fuera bloqueado, lo que resultó en la anulación del intento legislativo de manera definitiva.
«No se trata solo de aranceles, sino de la reconstrucción de poderes entre la administración presidencial y el legislativo», destacó el senador demócrata Ron Wyden.
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La economía estadounidense se contrae y crece el temor a una recesión
La votación coincidió con la publicación de cifras económicas preocupantes. La Oficina de Análisis Económico (BEA) informó que el producto interno bruto de los Estados Unidos se contrajo un 0.3% durante el primer trimestre del año. Este contratiempo, el primero en tres años, fue atribuido al aumento de las importaciones y a una reducción notable en el gasto público.
El gasto del consumidor mostró un crecimiento limitado, alcanzando solo un 1.8%, una cifra que refleja un estancamiento que podría prever una recesión en el horizonte. Tanto economistas como legisladores han señalado que la política arancelaria de Trump contribuye a la creciente incertidumbre económica.
«Los aranceles de Trump solo han servido para llevarnos al borde de una recesión», opinó el líder demócrata Chuck Schumer.
No obstante, el ex presidente Trump defendió su enfoque asegurando que la estrategia estaba enfocada, especialmente, en China. «Quizás los niños tengan que contentarse con dos muñecas en lugar de treinta. Tal vez eso cueste un poco más, pero al final, valdrá la pena», remarcó en una reciente declaración.
