Los familiares requieren progreso en caso de un accidente fatal de una mujer joven sola (Atlantic)

El trágico caso de Layla Vergara, una joven de 22 años cuya vida fue arrebatada en un accidente de tráfico en la comuna Soledad, Atlántico, ha conmovido a su familia y a la comunidad en general. Para homenajear su memoria y exigir justicia, los parientes de Layla establecieron un plantón en el lugar del accidente, con el fin de que las autoridades aceleren la investigación que, hasta la fecha, no ha mostrado avances significativos.
Durante la manifestación, los familiares de Layla expresaron su profundo desagrado por la falta de progreso en el caso, transcurridos apenas unos días después del fatídico incidente. Carlos Vergara, el padre de Layla, visiblemente afectado, manifestó su tristeza y frustración debido a la ausencia de respuestas por parte de las autoridades.
“Estamos aquí exigiendo una explicación sobre lo ocurrido con mi hija. El vehículo que la impactó en la parte posterior no ha sido identificado. Layla iba a Barrio Central de Los Ángeles para hacerse las uñas, y estaba en camino de regreso a su casa en el distrito de La Trinidad”, dijo Carlos con una voz llena de angustia.
El caso aún no ha sido procesado ni han tomado acciones específicas por parte de las autoridades. Foto:Cortesía
La familia de Layla se enteró del accidente a través de amigos de la joven, ya que esta no estaba en contacto directo con ellos al momento del suceso en Soledad. Tras el impacto, Layla fue trasladada al Centro de Salud, donde, lamentablemente, falleció varios días después.
Layla era estudiante de inglés y se estaba preparando para ser parte de un equipo de cabina, recordada por sus seres queridos como una persona “singular, muy agradable y con grandes sueños de crecimiento profesional”. Sus padres claman por justicia, buscando que la muerte de su hija no quede impune y que se identifique y sancione a los responsables de este trágico accidente.
La comunidad también se unió al plantón, alzando sus voces en consignas que reclamaban justicia y una respuesta inmediata de las autoridades competentes. Se unieron en una sola voz para demandar acción en un caso que ha dejado profundas huellas emocionales.
Hospital Universidad del Norte, donde Layla fue atendida Foto:Gracias a la amabilidad: Uninorte
Los eventos sucedieron el 7 de abril: aún no hay responsabilidad judicial.
El lunes 7 de abril, Layla se desplazaba en una motocicleta cuando fue brutalmente embestida por un vehículo. Tanto el conductor del coche como el motociclista abandonaron el lugar, dejando a Layla gravemente herida y sola en la escena.
Layla fue llevada al Hospital Universidad del Norte, donde estuvo nueve días en la UCI, lidiando con lesiones críticas. Durante ese tiempo, su familia la buscaba desesperadamente, sin saber que ella se encontraba entre la vida y la muerte. Fue identificada solo días después gracias a un tatuaje.
Lo más alarmante, según su familia, es que durante esos nueve días «la policía y las autoridades ignoraron repetidos intentos de que se quejaran sus familiares. No hubo respuesta ni monitoreo, y la vida de la joven Barranquilla fue ignorada».
Finalmente, el 18 de abril, Layla fue declarada muerta tras un diagnóstico de muerte cerebral. Actualmente, el caso permanece sin responsables ni acciones específicas por parte de las autoridades.
“Es crucial que se revisen las cámaras de seguridad del sector para identificar a las personas involucradas en este crimen. El abandono que sufrió Layla no fue solo físico, sino también institucional”, afirmó su familia, alzando sus voces en busca de justicia y responsabilidad.