Las exportaciones de carbón han caído un 34%, las pérdidas ascienden a millones de dólares y el sector está haciendo un fuerte llamamiento al gobierno. ¿Qué están pidiendo? – Primer plano
En el marco de la Cumbre Colombiana de Carbono 2025 – Fenalcarbón 30 años, que se realiza en Barranquilla, presidente de la Federación Colombiana del Carbón (Fenalcarbón), Carlos Cante, advirtió de la grave situación que atraviesa el sector por la pérdida de competitividad, la caída de los precios internacionales y el impacto de las medidas fiscales adoptadas en los últimos años.
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Según el dirigente sindical Al cierre del tercer trimestre de 2025, el país registra una reducción del 34,4% en las exportaciones de carbón, lo que significa 10,8 millones de toneladas menos respecto al mismo periodo del año anterior. Esta disminución representa casi 2.500 millones de dólares en pérdidas en regalías e impuestos, lo que impacta directamente los ingresos de las regiones manufactureras del norte del país.
«El shock de precios, la volatilidad del dólar, los altos fletes y las cargas fiscales han golpeado a este sector de una manera sin precedentes. Hoy tenemos carbón del interior del país que tiene que viajar más de mil kilómetros hasta el puerto y que, bajo el sistema fiscal actual, deja de ser rentable para exportar», explicó Cante.
Competitividad en riesgo
Fenalcarbón advirtió que el actual presupuesto y administrativo, sumado al cierre de algunos puertos, la prohibición de exportar a determinados destinos y el anticipo de ingresos más alto de toda la economía, que aumentó del 1,6% al 4,5%, está estrangulando financieramente a las empresas.
«Prevemos un superávit de ingresos de casi 2.000 millones de dólares, lo que reduce el margen operativo y desincentiva la producción. Muchas empresas prefieren no exportar, lo que se traduce en menores regalías, menor empleo y menor actividad económica en las regiones», afirmó el presidente del sindicato.
Carlos Cante, presidente de Fenalcarbón, durante una conferencia de prensa en Barranquilla. Foto:Carbón
Cante reafirmó que el país debe «restaurar la competitividad del carbón colombiano» no sólo para recuperar los niveles exportadores sino también para garantizar la estabilidad fiscal. «Si terminamos el año con esta tendencia, podríamos cerrar con una reducción de casi 20 millones de toneladas y pérdidas de hasta 2.500 millones de dólares en regalías de subdivisión», añadió.
Impacto global y perspectivas
A nivel internacional, el carbón sigue siendo una materia prima clave para las industrias del acero, el cemento y la energía. El consumo mundial se mantiene estable 8,9 mil millones de toneladas por año, y los analistas estiman que a pesar de la transición energética, la demanda se mantendrá estable durante al menos tres décadas.
«El mundo todavía necesita carbón, especialmente el carbón metalúrgico y el coque colombiano, reconocidos como de alta calidad. Lo que hay que cambiar no es el producto, sino la forma de producirlo: con tecnología, sustentabilidad y responsabilidad ambiental», enfatizó Cante.
El dirigente también enfatizó que ante la crisis energética nacional, que se caracteriza por la escasez de gas y una mayor demanda de electricidad, el carbón puede volver a tomar un papel estratégico en la matriz energética del país. «Habrá que volver a hablar del carbón, no como enemigo, sino como aliado tecnológico de la seguridad energética del país.«, sostuvo.
Seguridad y entorno minero
Cante también se refirió al deterioro de la seguridad en zonas mineras como el Catatumbo, Norte de Santander, donde continúan ocurriendo secuestros exprés, extorsiones y bloqueos. «Después de los disturbios del Catatumbo, nos queda un impuesto. La seguridad sigue siendo la misma y muchas operaciones se han cerrado porque las empresas no pueden coexistir con los grupos armados ilegales», afirmó.
La caída de los precios y de las cargas fiscales generó pérdidas para el sector del carbón. Foto:iStock
El sindicato apeló al Gobierno nacional y al Congreso revisar el marco regulatorio para la minería y crear condiciones que permitan la reactivación de la producción, las inversiones extranjeras y la estabilidad laboral.
«No se trata de pedir excepciones, sino de establecer reglas de juego claras, predecible y seguro. Colombia tiene un potencial enorme para el carbón térmico y metalúrgico, pero si seguimos perdiendo competitividad las consecuencias serán estructurales”, advirtió el presidente Fenalcarbón.
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Al finalizar su intervención, Cante destacó que la solución no es abandonar el sector, sino modernizarlo y vincularlo a la transición energética. «
Pidió dejar de perseguir el carbón y hacerlo parte de la solución. “La minería puede y debe seguir contribuyendo a la productividad y la estabilidad fiscal del país”, señaló.
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